El cantante estadounidense tendrá que pagarle 2,95 millones de dólares a promotores irlandeses por haber cancelado un concierto a último momento en el 2008, según dictaminó ayer, un juez en Dublín.
El juez del Tribunal Superior, Peter Kelly, dijo que hacía públicos los daños porque Prince no ha pagado nada de lo acordado confidencialmente el 26 de febrero a los promotores de MCD Productions Ltd.
Kelly decidió que el músico se había comprometido a actuar, en junio de 2008, en el Croke Park de esa ciudad, con 82.300 butacas, pero canceló su concierto sin explicación apenas unos días antes, cuando ya estaban vendidas 55.000 entradas.
El abogado de Prince, Paul Sreenan, accedió a la orden.